5 may 2013

Mi querido amigo Ander.

Buenas noches. Hoy la inspiracion flota gracias a la luna llena y a una persona especial que acabo de descubrir.
Quiero dedicar esta historia especialmente a Ander. Se que no puede leerme, pero su mente si me escucha. Estoy seguro. Uff!!
Antes de empezar, acabo de recibir un mail de una gata amiga mia, Monie, que quiero compartir con vosotros.
Aún estoy desorientado despues de leerla, pero la comparto.. Monie quiere que se sepa todo.
Me avisa que está escondida, mientras unos policias rebuscan en su casa ,por una historia algo dificil de entender.

Una tarde muy fria de invierno,en la habitación de un hospital ,se oían los lloros de un bebé por encima de la alegria de todos.
La familia estaba muy contenta con ese niño, buscado y por fin en su compañia. Pero el, seguía llorando y mucho.
La madre no entendia porqué lloraba tanto, hasta que a media noche, y viendo la luna por la ventana, el bebé calló. Al girarse ella, sorprendida por el silencio, vió al gato, este miraba fijamente al niño a cierta distancia.
Ella se asustó, pero no hizo nada, no podía. El gato la miró y volvió a desaparecer por la puerta entreabierta. La mujer olvidó el incidente, aunque varios meses después observando al niño, vió algo extraño en el. Miraba fijamente pero no parpadeaba.
Confusa lo llevó al médico para una revisión, este confirmó la curiosidad, pero no le dió mayor importancia, sin embargo cada vez más, la madre notaba que su hijo miraba fijamente los objetos pero no reaccionaba al estímulo.

Ese invierno fué un suplicio para ella, un dia si y otro tambien el niño no acababa con sus problemas, parecia muy débil.
Los médicos decían que no pasaba nada. Pero la madre sabía que su hijo no era normal, se quedaba hipnotizado.
Un amigo la convenció para que tuviera un gatito, las mascotas siempre van bien para los niños y ella lo pensó. Pero no se decidía a hacerlo y siguió confiando en los médicos.
El tiempo pasaba y más claro quedaba.

Un dia, por fín, un doctor, después de más pruebas, pudo contarle la verdad; El niño era especial, tenia poca movilidad y toda su fuerza se concentraba en su mente, era muy inteligente, diferente.
La madre se asustó, después de cinco años luchando, no podía más.
Esa noche en su casa, mirando al niño rompió a llorar, no podia, no sabia entender. Pero no dudaba. En ese momento observó el reflejo de la luna llena en la ventana, y recordó, sus dudas se disiparon y al girarse, alli estaba el gato, negro, brillante, mirando fijamente al niño, pero no se asustó esta vez, lo dejó alli.
Confiada se fue a su habitación y por primera vez desde que nació su hijo, durmió tranquila, contenta.
Mañana será diferente pensó, y lo fué.
A partir de aquel dia el niño fue mejorando, reaccionaba a los estímulos, escuchaba y empezaba a hablar, oia mejor,
Una noche la madre despertó, se acercó a la habitación y oyó hablar al niño con el gato. Vió la ventana abierta, antes de poder moverse, su hijo saltó con el animal por ella, pero no podia gritar, no tenía voz, estaba paralizada.
Si observó como el niño miró atras y al verla la tranquilizó, sin hablar, ella notó su gesto y su calma. Durmió. Al cabo de unos dias por la ciudad corría una noticia, ningun diario se hizo eco, un niño y un gato impidieron el robo, la gente lo explicaba y ella no lo creia.
Esa noche volvió a mirar en la habitacion y no estaban.
La ventana abierta. Volvió a notar aquella tranquilidad, sabia que estaría bien. Y durmió convencida.

Al dia siguiente le explicaron que un niño acompañado de su gato salvaron a dos personas que habían caído al rio con un coche.
No podia ser.
Cada dia que pasaba, el niño y su gato eran más famosos por la zona. Y la madre no pudo más, decidió preguntarle.
Sabía que no podía hablar ,pero entendió en su mente, su labor, su deseo; Ayudar y hacer felices a los demás.
El la cogió de la mano, la arrastró a la ventana y saltaron.
Flotaban, volaban, siempre al lado de su gato. Reian.
Hacia muchos años que no era tan feliz, por fín entendia que su hijo era diferente pero mejor, era bueno.
Y siguió riendo.
Aquella noche comprendió a su hijo y llegó derrotada a casa, el gato estaba con ellos.
A la mañana despertó, no podía ser, habia volado, habia reido, era feliz, pero algo pasaba...
Era mas joven!
Fué a la habitación, alli estaba el niño, un bebé, no estaba el gato, lo despertó, lloraba.
Pero, como, pensó; Todo había sido un sueño, su hijo era normal?
No entendia nada. Qué pasaba?
El bebé seguia llorando. lo calmó, meciéndolo.
Volvió a su habitación y allí estaba el gato, llamaba su atención, se acurrucaba en sus pies. Maullaba cada vez mas fuerte.

Y despertó...
Estaba en su butaca, el gato encima de su abultada barriga, el bebe daba patadas, y lloró.
Era feliz, recordó, mañana eran las pruebas para comprobar si el niño venia bien. Sonrió, todo era un sueño. Irían bien, estaba segura.
Aunque una cosa la agitó; Quien sería ese gato? Ella no tenia.
El animal la miraba intensamente,  no se movió.

La noche era oscura, sonaba el viento en la calle, un sudor frio recorrió su cuerpo, la pesadilla había acabado. Se tocó la barriga, faltaba poco, pero su sueño la perseguia, el médico no vió nada extraño.
Aunque el gato maullaba.
Esa mañana una tormenta acechaba, sonó el timbre de la puerta, ella lentamente se levantó y abrió.
Una mujer esperaba, de cabellera brillante y muy sonriente, se dirigió a ella por su nombre.
-Lunet soy tu solución, le dijo.Tu hijo ha sido elegido, tienes que seguir mis recomendaciones para que todo vaya bien.
Ella le preguntó quien era..
-Ya te lo he dicho, soy la única solución que tienes, tu sueño se hará realidad, tu hijo no será capaz de vivir aquí solo. Le explicó como conseguir que su hijo naciera bien, o eso entendió.
La mujer siguió con sus instrucciones.
Mañana debes acercarte al puerto, allí un velero llamado Monie te espera, tienes que subir y tener a tu hijo en altamar.
Lunet no queria aceptarlo, pero como luchar contra eso, quien quiere un hijo diferente?
Y estalló la tormenta.

El gato no dejaba de maullar, el médico no vió nada, pero esa mujer la perturbaba, ella sabia que el niño no vendria bien.
Y preparó todo, la ropa del bebe, la suya, la maleta. No pudo dormir casi. Temprano se acercó al puerto. Alli estaba.
Nada mas ver el velero sabía que hacía lo correcto y subió.
El capitán le preguntó;
-Eres lunet?
-Si, contestó.
 La acompañó a su camarote.
 Por la tarde, después de una ligera comida, unas tostadas con queso fresco y mermelada, el barco zarpó.
 El sol iluminaba el mar.
 El atardecer empezó a adueñarse del dia, no sabía donde iban, pero los dolores empezaron pronto.
 Aquella mujer estaba alli.
 La tranquilizó, le susurró al oido, soy su hada madrina. Piensa en que nombre usaras para llamarlo.
-Es un niño, verdad? Preguntó ella.
-Si, contestó la mujer hada ,es un niño
-Pues lo llamaré Ander. dijo Lunet.
 Mientras se intensificaban los dolores, la luna asomaba.
Cuando más apretaban, la mujer la llevó a una piscina dentro del barco conectada al mar.
-Aqui ven, le dijo.
Y vió al gato, ya no maullaba, ella se dejó guiar, poco después se oía el llanto del bebe.
-Esta bien? Preguntó lunet.
-Aqui perfectamente, le contestó la mujer, es su hogar, el mar.
-Pero!! No, no puede ser, contestó Lunet. Lo quiero conmigo.
El bebe dejó de llorar, flotaba en el agua, se veia feliz.
-Tienes que entenderlo le dijo la mujer, el pertenece al mar.
 Lunet se negaba a aceptarlo. La mujer siguió con su explicación.
 -Su enfermedad no lo dejará vivir contigo, necesita el agua.
Ahora, cuando la luna brille en todo su esplendor, una sirena lo recogerà y lo llevará a su nueva vida.
Alli será feliz. Y cada vez que veas la luna brillar entera, Lunet acércate al mar y podrás hablar con el.
Es tu hijo, será el rey del océano.
Lunet no estaba de acuerdo, pero de pronto una sirena apareció en la piscina, su canto llenó de felicidad a todos.
Mientras le asaltaban las lágrimas vió como la sirena ,rodeada de delfines, se llevaba el bebé.
Ella sintió tranquilidad.
Días después despertó en su cama, era feliz, su hijo era un rey, era especial, era el mejor hijo.
Los maullidos seguian, esta vez eran dos los gatos. Ella estaba muy contenta, buscó un calendario, dentro de poco habría la luna llena.
Volvería a ver a su hijo, su rey.
Las lágrimas se deslizaban por su mejilla, el gato se acercó. Ella lo tocó.
La gata se subió y se acurrucó en su barriga, siguió acariciandolos, mientras pensaba en la noche, en la luna llena!

Esta historia es parte de la imaginación de una gata llamada Monie, nunca se basa en la realidad como la conocemos.
Gracias Ander!
Y cuando veas la luna llena, acercate al mar. Podras ver a Lunet hablando con su hijo.

Monie quiere acabar esta historia, lo importante no es la normalidad de un bebe, sino el cariño que le dediques.
Todos somos diferentes, pero todos somos.
Gracias Monie eres mi gata preferida.

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